Horneando con impacto: cómo nuestros becarios endulzaron el espíritu de equipo

De la bandeja de horno a la donación: los becarios organizan un exitoso bazar de pasteles por una buena causa
¿Cómo es en la práctica la formación especializada? En Mounting Systems, la respuesta es: con iniciativa, espíritu de equipo y una pizca de creatividad. Nuestros tres aprendices del área de oficinas han demostrado exactamente eso y han puesto en marcha un proyecto interno que conecta, emociona e incluso tiene un impacto fuera de lo común.
Lo que empezó como una simple idea se convirtió rápidamente en un auténtico proyecto comunitario. Un bazar de pasteles organizado por los becarios para sus compañeros. Se organizó sin presupuesto y se financió únicamente con donaciones voluntarias de pasteles por parte del equipo. La variedad en la mesa del bazar era impresionante. Desde la clásica tarta de manzana y la húmeda tarta de chocolate hasta magdalenas decoradas con cariño, había para todos los gustos. Entre las 11.00 y las 13.00 horas, los asistentes vendieron, saborearon y, sobre todo, crearon algo juntos.
Los tres becarios se encargaron de la organización completa del proyecto. Desde la comunicación interna y la coordinación de las donaciones hasta la realización el día de la venta, todo estaba en sus manos. No solo pudieron demostrar sus dotes organizativas, sino también aprender lo importantes que son la coordinación, la responsabilidad personal y la cooperación interdepartamental en el trabajo diario.

Más que una donación: Una señal clara de compromiso activo
La recaudación del bazar, una considerable suma de tres cifras, se donó al servicio de cuidados paliativos de Rangsdorf. Una organización que acompaña a las personas en su última fase de la vida y apoya a los familiares en duelo.
El proyecto fue todo un éxito, no sólo por la cantidad donada, sino también por el impulso duradero que ha creado en nuestra empresa. Ha demostrado lo importante que es dar responsabilidades a los jóvenes y lo mucho que pueden conseguir si se les da el espacio necesario para ello.
Queremos dar las gracias a todos los donantes de pasteles, a nuestros colegas por su apoyo y, sobre todo, a nuestros tres entregados alumnos. Su compromiso es un gran ejemplo de cómo la formación puede organizarse con sentido e impacto.















